Nací el 14 de febrero de 1990  en la ciudad de México.

Nací sin brazos y con una pierna más corta que la otra.
Fui tratada en el Hospital Shriners, donde se me brindó la atención necesaria que en su momento requeria. Nunca tuve un diagnóstico del por qué de mi discapacidad. Fue decisión de Dios, y mis padres así asumieron el reto, puesto que desde muy pequeña me hicieron muy independiente y todo lo hago con los pies.

Gracias a Dios he aprendido a valerme por mi misma y no me dejó caer ante cualquier adversidad.

A la edad de cuatro años me entregaron mi primer prótesis y al año me dieron mi segunda prótesis (brazos de plástico) . Estoy sumamente agradecida con el hospital que me vió crecer y me ayudó tanto. Tuve cuatro operaciones para nivelar mis piernas y seis operaciones en el quirófano.

Cursé de manera normal la primaria y secundaria, sin necesidad de escuelas especializadas, ya que use mis pies para escribir.

A la edad de dieciocho años, Jorge Magaña y Jaquelin Espinoza que creyeron en mí, me dieron trabajo. Tiempo después conocí al Sr. José Luis Torices, pintor con boca que actualmente es becario de la Asociación de Pintores con la Boca y con el Pie quién me impulsó a incurcionar en el mundo de la pintura.

Actualmente tomo clases con la Profesora Silvia Sarmiento.

Agradezco a Dios, a mis padres, hermanos y ahora a mis sobrinos por todo el apoyo y esfuerzo que han hecho por mí.

Gracias.

Pin It on Pinterest